Figuró por primera vez en un billete del Estado de Florida en el año 1863; en 1864, durante la Guerra Civil y con la intención de “despertar el espíritu religioso” fue acuñada en las monedas de II centavos. En 1868 el Estado de Florida la agregó a su escudo.
El lema o slogan (originalmente:”In God in our trust” –En Dios está nuestra confianza-) fue tomado de un poema escrito por el abogado y poeta Francis Scott Key (1779-1843) quien se encontraba en puerto de Baltimore el 14 de septiembre de 1814, en busca de la liberación de un anciano médico y se enteró del inminente asalto británico a Baltimore y el Fuerte McHenry. Fue escoltado de regreso a su corbeta por marinos británicos para que no pudiera avisar a los norteamericanos. Dos días duró el ataque y Key se paseaba por el puente de su nave tratando de divisar la bandera que ya no ondeaba sobre el fuerte; allí escribió el poema “En defensa del Fuerte McHenry” en el que hizo alusión cuatro veces a la “Bandera estrellada”.
Compuso la letra del poema siguiendo la melodía y el ritmo de una canción inglesa de taberna que estaba de moda: “A Ana Creonte que está en el cielo”. Fue impresa en octavillas que se repartieron en las calles de Baltimore. Fue cantada en público por primera vez el 19 de octubre de 1814. El 3 de marzo de 1931, por resolución del Congreso, firmada por el presidente Herbert Hoover el poema fue designado himno nacional.
El 30 de julio de 1956 el presidente Eisenhower firmó la ley que la incorporó definitivamente el lema “In God we trust” en las monedas y los billetes de Estados Unidos, en la época del Macartismo (1950-56) – aún vigente- originada por el senador católico por Wisconsin Joseph McCarthy, quien con inesperado éxito promovió una cacería de brujas denunciando una conspiración comunista en el Departamento de Estado. La creciente tensión mundial, la URSS experimentaba la bomba atómica, Mao ascendía al poder y la Guerra de Corea se anunciaba. Eisenhower llegó a la presidencia en el momento cumbre del senador McCarthy y el “macartismo”, (Término inventado por el caricaturista editorial del Washington Post Herbert Lawrence Block “Herblock” -1909-2001-, Premio Pulitzer en los años 1943, 54 y 79), que poco a poco fue perdiendo credibilidad e incluso el Pentágono y el presidente ya consideraban incómodo a McCarthy. Comenzaron a elevarse voces contra el “macartismo o satanización de las ideas de izquierda” y su costumbre de acusar a la gente; fue llamado a una Comisión Senatorial para explicar sobre las presiones que ejerció para lograr un tratamiento favorable a uno de sus aliados políticos. El senado le dio un voto de censura el 2 de diciembre de 1954; olvidado –más no el macartismo- y ante la indiferencia general, murió en 1957 entregado al alcohol.
Desde ese momento creció la discusión sobre la conveniencia o no de dicha frase en las monedas y billetes; la discusión no ha cesado. En 1990 la “Fundación por la Libertad Religiosa” inició una campaña para remover la frase, pues “es violatoria de las normas que separan Estado e Iglesia y además “atenta contra la libertad de cultos”. La última apelación fue ante la Corte Suprema.
El lema “In God we trust” fue incorporado al escudo del Estado de Georgia en el año 2003, después de una consulta popular. Cuenta la historia que durante la gran migración a California por la “fiebre del oro” entre 1848 y 1858 los avances en comunicaciones y transporte y servicios públicos fueron inmensos.
Pocos mineros de hicieron ricos, pero si lograron fortuna sus proveedores de los elementos necesarios para la minería. De allí nació un cambio en el lema: “In gold we trust” que es el lema predominante del mundo de hoy. Autor: Bernardo González White
El lema o slogan (originalmente:”In God in our trust” –En Dios está nuestra confianza-) fue tomado de un poema escrito por el abogado y poeta Francis Scott Key (1779-1843) quien se encontraba en puerto de Baltimore el 14 de septiembre de 1814, en busca de la liberación de un anciano médico y se enteró del inminente asalto británico a Baltimore y el Fuerte McHenry. Fue escoltado de regreso a su corbeta por marinos británicos para que no pudiera avisar a los norteamericanos. Dos días duró el ataque y Key se paseaba por el puente de su nave tratando de divisar la bandera que ya no ondeaba sobre el fuerte; allí escribió el poema “En defensa del Fuerte McHenry” en el que hizo alusión cuatro veces a la “Bandera estrellada”.
Compuso la letra del poema siguiendo la melodía y el ritmo de una canción inglesa de taberna que estaba de moda: “A Ana Creonte que está en el cielo”. Fue impresa en octavillas que se repartieron en las calles de Baltimore. Fue cantada en público por primera vez el 19 de octubre de 1814. El 3 de marzo de 1931, por resolución del Congreso, firmada por el presidente Herbert Hoover el poema fue designado himno nacional.
El 30 de julio de 1956 el presidente Eisenhower firmó la ley que la incorporó definitivamente el lema “In God we trust” en las monedas y los billetes de Estados Unidos, en la época del Macartismo (1950-56) – aún vigente- originada por el senador católico por Wisconsin Joseph McCarthy, quien con inesperado éxito promovió una cacería de brujas denunciando una conspiración comunista en el Departamento de Estado. La creciente tensión mundial, la URSS experimentaba la bomba atómica, Mao ascendía al poder y la Guerra de Corea se anunciaba. Eisenhower llegó a la presidencia en el momento cumbre del senador McCarthy y el “macartismo”, (Término inventado por el caricaturista editorial del Washington Post Herbert Lawrence Block “Herblock” -1909-2001-, Premio Pulitzer en los años 1943, 54 y 79), que poco a poco fue perdiendo credibilidad e incluso el Pentágono y el presidente ya consideraban incómodo a McCarthy. Comenzaron a elevarse voces contra el “macartismo o satanización de las ideas de izquierda” y su costumbre de acusar a la gente; fue llamado a una Comisión Senatorial para explicar sobre las presiones que ejerció para lograr un tratamiento favorable a uno de sus aliados políticos. El senado le dio un voto de censura el 2 de diciembre de 1954; olvidado –más no el macartismo- y ante la indiferencia general, murió en 1957 entregado al alcohol.
Desde ese momento creció la discusión sobre la conveniencia o no de dicha frase en las monedas y billetes; la discusión no ha cesado. En 1990 la “Fundación por la Libertad Religiosa” inició una campaña para remover la frase, pues “es violatoria de las normas que separan Estado e Iglesia y además “atenta contra la libertad de cultos”. La última apelación fue ante la Corte Suprema.
El lema “In God we trust” fue incorporado al escudo del Estado de Georgia en el año 2003, después de una consulta popular. Cuenta la historia que durante la gran migración a California por la “fiebre del oro” entre 1848 y 1858 los avances en comunicaciones y transporte y servicios públicos fueron inmensos.
Pocos mineros de hicieron ricos, pero si lograron fortuna sus proveedores de los elementos necesarios para la minería. De allí nació un cambio en el lema: “In gold we trust” que es el lema predominante del mundo de hoy. Autor: Bernardo González White